Los que quieren ver muchos tweets y noticias, los amantes de los cambios en reuniones invernales te dirán que existió un ganador o perdedor en el cambio de hoy entre Boston Red Sox y Chicago White Sox.
Yo no diré eso. Porque creo que existe ahora una vertiente nueva dentro de un trade y esa es cuando no gana nadie.
Sale a Boston. ¿Les falta un as? Ellos supuestamente tienen uno en David Price que costó 217 M. Tienen un pitcher Cy Young en Rick Porcello. Y entonces? Existía tanta necesidad de sacrificio en Sale? El jefe de operaciones del béisbol de Boston Dave Dombrowski dirá que sí. Pero no debemos ir tan rápido.
Hablamos de un lanzador que ganó 17 juegos en 2016 y tal vez sea pronto (desde hace años se espera) el justo Cy Young de la AL. Tirará más de 200 innings y más de 200 ponches, seguirá siendo dominante y el as de siempre. Pero el chico de Lakeland se fue triste de Chicago. No fue entendido. Sus problemas con la gerencia venían desde marzo cuando apoyó a Adam LaRoche en el combate que derivó en el retiro, o el día que no quería jugar con las camisetas retro y las rompió.
La relación del GM Rick Hahn y Sale era un hilo que se cortaría solo. Ahora luego de tantos años de ser el equipo de Grandes Ligas que ni reconstruye ni es contendiente, White Sox comienza a dar un paso atrás.
Este cambio presupone que ellos saldrán de Todd Frazier, Brett Lawrie, José Abreu o José Quintana en las reuniones invernales, spring training, o en la fecha límite de cambios del 31 de julio. Tal vez Dave Robertson y Melky Cabrera estén envueltos. Lo surrealista es: ¿por que ahora? El sistema de granjas de ellos está debilitado y ahora deben armar la reconstrucción por medio de cambios.
Por otra parte, Boston no debió cambiar a Moncada, Michael Kopech, Luis Basabe y Victor Diaz.
Lo que sucedió con Boston fue un cambio de gerencia, Dombrowski que es un hombre de presente diluyó en un segundo el trabajo de varios años para el futuro. Él pensó que Moncada no tenía lugar en su equipo. Tal vez tercera base? o tal vez? no, ya no hay más posiciones. Cambió a Travis Shaw a Milwaukee y ahora tiene a Sandoval.
Moncada podrá desbordar su talento de calibre MVP lo mismo en segunda que en tercera. Michael Kopech (1era ronda del draft 2014) tiró 105 millas hace 3 meses. Lanzó 52.0 innings en Salem A+ y ponchó a 82. Es un émulo de Syndergaard o simplemente un pitcher de poder con clase para ser abridor 1 o 2 en MLB. Basabe es un tercera base de contacto, lo asimilo a Luis Valbuena. El venezolano pegó 12 HR y bateó 264 entre A y +A en 2016. Y el derecho Víctor Díaz aún necesita desarrollo con 22 años, tiene estatura y poder. Estoy seguro que en 2 años pueda ser un abridor 4 o 5 de alguna rotación o pitcher de emergencia de bullpen.
Lo que vimos hoy fue un cambio de presente por futuro. Pero el presente tiene el futuro cercano a un lado, y el futuro, a veces tienes que verse desde el presente. Boston no tiene asegurado nada para la próxima temporada en una división monstruosa.
Ellos perdieron 18 oportunidades de salvamento y no han mejorado ese eslabón. Perdieron 27 juegos desde el bullpen y aún no existen adiciones. Es igual lo que ganas a un lado lo pierdes al otro.